Mi papel en
mi comunidad
“El aumento de la violencia en mi
comunidad sus consecuencias y una
posible solución para eliminarla.”
María Cristina Ramírez Escobedo
Modulo Ocho
10 de Agosto de 2015
Uno de los
fenómenos sociales que más ha afectado a mi comunidad ha sido la ola de
violencia en que se ha vivido los últimos años, no solo en el delito sino
también parece haber contagio en la población civil al verse desprotegida por
las autoridades que no hacían nada para
salvaguardar la integridad de los ciudadanos, y por el contrario coludidos con
la delincuencia, sometían y extorsionaban a la ciudadanía, o se hacían de la
vista gorda. Esta falta de estado de
derecho hizo a las personas de mi comunidad entrar en desconfianza de todo, pues
no sabías si los policías eran policías o delincuentes.
Muchos
fueron los actos violentos de forma desmedida que muchas personas vivieron y
vieron , ya que muchos colonos se daban
cuenta como llegaban supuestas camionetas ministeriales a llevarse a sus vecinos
que nunca volvían a ver, o camionetas
que abandonaban en plena madrugada llenas de cuerpos mutilados. La
participación de jóvenes en estos hechos violentos era bastante evidente, muchos dicen que obligados o deslumbrados por
todo lo que los delincuentes les proporcionaban para hacerlos sentir con poder
induciéndolos a la adicción para luego hacerse dueños de su voluntad y
obligarlos a cometer los crímenes.
Todos estos
sucesos trajeron un impacto muy fuerte a la sociedad de mi comunidad pues las extorsiones
y el miedo llevo a muchos propietarios de negocios a cerrar y emigrar junto a
sus familias, muchas personas quedaron sin empleo por estos hechos. Los delitos
ahora son mas visibles y sin que nadie haga nada por detenerlos, Los niños,
adolescentes y jovenes, estan demostrando admiración hacia la forma en que
estos delincuentes se desenvuelven y adquieren bienes economicos y materiales,
admiración que los está llevando a querer imitar los actos violentos que hacen
los delincuentes.
Tal como
arrojan los estudios de Médicos sin Fronteras sobre las afectaciones que
tienen en la salud mental de la
población los altos índices de violencia,
parece verse ya de manera normal
que los niños, adolescentes, jóvenes y adultos quieran arreglar sus diferencias
de forma violenta, ya no es solo la violencia doméstica o intrafamiliar ahora vemos casos de acoso estudiantil que han llegado hasta provocar la muerte entre
estudiantes, políticos en las cámaras de
diputados o senadores que han llevado sus diferencias hasta los golpes, manifestantes en sus marchas que han
agredido establecimientos comerciales u
oficinas gubernamentales, niños que juegan a ser secuestradores o violadores,
etc.
Es
importantísima la participación de la familia, maestros, autoridades
estudiantiles y locales así como la participación de organismos no
gubernamentales para lograr un verdadero cambio en la mentalidad de los niños,
adolescentes y jóvenes, y tener un
presente sin violencia para un mañana de
paz.
Una
inadecuada estimulación del juicio crítico y una pobre consejería de padres,
profesores y profesionales respecto a las conductas que acarrean ciertos y
serios riesgos, deja al adolescente abandonado al estímulo negativo de los
medios masivos y a la influencia de su grupo de compañeros y amigos.
Cuando los
padres tienen una presencia de calidad en la vida de sus hijas/os estos tienden
a desarrollarse mejor en diversas áreas, tales como su salud física y mental,
motivación al estudio, rendimiento académico, desarrollo cognitivo y
habilidades sociales, mayor autoestima, menos problemas de conducta, mayor
tolerancia al estrés, entre otras.
Desde la perspectiva de los propios
padres, aquellos hombres que están involucrados en su paternidad presentan en
promedio mejores indicadores de salud, tienen mayor probabilidad de estar
satisfechos con sus vidas, de vivir más, de enfermar menos, de consumir menos
alcohol y drogas, de experimentar menos estrés, de accidentarse menos, de tener
una mayor participación en la comunidad.
La presencia activa y corresponsable
del padre también suele ser positiva para las madres, quienes tienden a tener
menos sobrecarga en las tareas de cuidado y domésticas y a incrementar su salud
física y mental.
Algunos hombres padres de familia
creen que la responsabilidad de la crianza de los hijos es única y exclusiva de
la mujer, esto es un error pues la
participación de ambos es una obligación común para el correcto desarrollo de los hijos. (Convención
de derechos de los niños en su Art.18)
Tener fe y amor a Dios se ha vuelto
una balsa de rescate para estos difíciles tiempos en que vivimos, pero es
necesario conocer lo que dice el libro de la Biblia para llegar a conocer y
sentir amor por Dios, este libro a quien muchos de nosotros nos cansa de tan solo
pensar en llegar a comenzar a leerlo es un libro muy instructivo e interesante,
como lo dice
2Timoteo 3:16, 17 “Toda
Escritura es inspirada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para
rectificar las cosas, para disciplinar en justicia, para que el hombre sea enteramente competente y esté
completamente equipado para toda buena obra”.
El libro de la Biblia está
constituido por libros que fueron escritos desde antes y después del nacimiento
de Jesucristo, y narra historias verídicas que se pueden comprobar, además
podemos descubrir la relación que hay entre este libro y los ideales de algunos
personajes importantes de nuestra historia y filósofos de todos los tiempos, así
también de los famosos refranes o dichos que muchos de nosotros conocemos, y de
los principios y preceptos de nuestras leyes, garantías y derechos.
Mi
propuesta es promover el alimento espiritual entre la población sin importar la
religión a que pertenezca. Pudiera incluirse el estudio de la Biblia y su
aplicación práctica en la sociedad y diario vivir dentro de las clases de
tutoría. Esto ayudara a la población joven a
comprender la finalidad de nuestra existencia y que es posible encontrar una solución
pacífica a nuestras diferencias, el intercambio de ideas y discernimientos
entre los estudiantes en la comprensión y estudio de este libro puede mejorar
también el uso que se le dé a la tecnología y medios masivos de comunicación.
No es
necesario ser un profesionista para instruirnos en la Biblia y sacar de ella el
mejor consejo para vivir en paz y armonía, pues en ella encontramos verdadero
consuelo a nuestras angustias e incertidumbres, sobre todo en la etapa de la
adolescencia, tampoco es necesario que
sea de una editorial en específico ya que
toda biblia tiene el mismo contenido. Lo importante es destacar la interpretación
que le de cada persona y llegar a una
conclusión, bien dicen que la verdad nos hará libres y no hay mejor libertad
que la de las ataduras que nos ponen los miedos de la ignorancia, la seguridad
que nos da el alimento espiritual no la encontramos en ninguna ley terrenal.
La
promoción del estudio de la biblia debe ser de manera general pues es necesaria
la participación de todos para la transformación completa.
La
violencia es una forma de ser que se
genera desde el núcleo familiar, entonces es desde ahí donde debemos comenzar
para que el cambio realmente suceda. Si
las familias optaran por dar un tiempo de estudio a la Biblia esto generaría el
crecimiento de su unión y amor por
Dios, por tanto su fe se vería fortalecida. Si científicos y filósofos desde la
antigüedad y hasta en nuestros tiempos han admitido que existe una fuerza
invisible que nos mueve a los seres
humanos, entonces la fe en Dios puede ayudarnos
a dejar atrás las actitudes
negativas.
Dar un buen ejemplo cristiano impacta
directamente a los hijos desde los pequeños hasta los adolescentes, pero la constancia lograra que el cambio se mantenga
permanente.
No hay una
edad límite, desde pequeños hasta ancianos podemos estar adquiriendo
conocimiento de manera constante, que
nos fortalezca nuestros valores espirituales y nos de la sabiduría para
enfrentar las problemáticas que se nos presenten en nuestro diario vivir.
Mi cartel está dirigido a toda clase de persona
con la finalidad de que se comprenda que si se tiene amor a Dios y se inculca
el amor al prójimo dentro del núcleo familiar habrá paz afuera.
Referencias:
(2012), F.
Aguayo, P. Correa y E. Kimelman, ESTUDIO
SOBRE LA PARTICIPACIÓN DE LOS PADRES EN EL SISTEMA PÚBLICO DE SALUD DE CHILE